Fragmento de Historias de una Baranda
Tenia recuerdos de culos, miles y miles de culos a través de su larga existencia unos pequeños, nalgas duras, otros cubiertos con enaguas que le quitaban placer al roce calentito, otros pesados y fofos, algunos valientes y atrevidos, otros siempre frenándose para no fluir con su propio peso...pero una mano peluda !!
el primer tramo de la baranda de Independencia... el culo quedaba de medio lado en la curva. ¡qué bueno, Raque!
ResponderEliminaresa mano peluda...
Cuantos amigos y obstinadas posaderas...
ResponderEliminar¡ Y todo ello ayuda al ejercicio intelectual de las barandas !
Jajajjajaa, si esas barandas pudieran escribir sus historias... Serían todas eróticas... Y divertidas! :-)
ResponderEliminarBesos! xxx